Mensaje de Enero 2 2023

Caminando sobre las aguas

Mensaje de Enero 2 2023 – Mensaje de San José.

¿Cómo no confiar?

San José dice: “Sí, hijo mío, estoy presente. Estoy presente en el amor y en el nombre de mi Hijo Jesús para ayudar a guiarte para la gloria de su pueblo y la gloria de Dios, que es eterno y siempre será mi Hijo”.

‘San José gracias por estar presente conmigo. Gracias por amarme y llamarme hijo tuyo. Quisiera pedirte que, según la Escritura, el ángel del Señor se te apareció tres veces en sueños separados y tú respondiste con gran fe: con conocimiento y confianza en el gran misterio de la Voluntad divina de Dios para guiarte’.

San José pregunta: “Sí, hijo mío, y ahora, ¿qué quieres preguntarme”?

‘¿Cómo lo supiste, cómo llegaste a tal fe que en sueños, al despertar, tomaste la decisión de huir’?

 San José responde: “Hijo mío, he oído tu corazón y he escuchado tu grito. Lo supe porque creí, confié, en la misericordia de Dios para guiar a su pueblo a través de los profetas de antaño. Luego confié en que Dios nos llevaría a mí y a María de vuelta a la tierra prometida de Israel, donde sabía que estaríamos a salvo.

No fue fácil, hijo mío, que yo dejara mi tierra para entrar en Egipto. Pero a través de los signos de misericordia y prodigios de Dios, creí: primero en el sueño del ángel que me anunciaba el nacimiento de Jesús a través de María y que debía tomar la como esposa confiada, que fue mi primera confirmación de esperanza en el nacimiento de Jesús, en el nacimiento del Mesías a través de la virgen eterna, María mi esposa, para la salvación del pueblo de Dios. ¿Cómo no iba a confiar?

Luego, en las apariciones del segundo y tercersueño, era Dios quien me hablaba, para guiarme y mantenerme a salvo.

Los días que siguieron en Nazaret fueron pacíficos mientras criábamos a Jesús en preparación para que su obra y su vida se cumplieran al ofrecer su vida por amor a Dios, su Padre, y por toda la humanidad.

¿Cómo lo supe? Ahora la pregunta es: “¿Cómo podía no saberlo? Hijo mío, como sus hijos, debemos empezar a confiar en Dios y creer en los milagros y maravillas de los signos que sólo Dios puede cumplir.

Sí, levántate este día para recibir y compartir las maravillas que Dios te está dando para sus hijos. Puedes compartir este mensaje, hijo mío, con mi pueblo, especialmente para aquellos que me han sido tan devotos y confiados como buen padre de Jesús y mi esposa, la esposa eterna de Dios, la santa virgen, María”.

‘Te amo San José y te consagro mi corazón con el Sagrado Corazón de Jesús y el Inmaculado Corazón de María. Gracias porvenir a mí. Y gracias por amarme’.

 San José dice: “Hijo mío como Jesús se te aparece en la noche para ofrecerte su mano, toma su mano. Tómala y deja que te guíe. Confía, da gracias a Dios que cuidará de ti, como yo confié, como yo tuve que confiar.

Te amo, hijo mío, y puedes invocarme siempre que lo desees”.

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San José dice: “Mi querido hijo, mi vida no fue complicada. Fue sencilla porque yo era un hombre sencillo. Deseaba permanecer humilde en mi corazón, entregado a Dios y a mi familia, amarlos y apoyarlos en el aliento y el coraje de la fe en todos los sentidos.

Llamo a todas las almas a vivir la sencillez y la humildad de la fe.

Descansad ahora y animaos, regocijándoos en el amor que Dios, nuestro Padre, os tiene.”

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